En el mes de marzo de 2016 decidimos ir un fin de semana de buen tiempo a la villa de Cedeira, en el norte de la provincia de La Coruña.
El hotel no se encuentra dentro del pueblo de Cedeira sino a las afueras, pero es fácil de encontrar ya que figura en Google Maps.
Tiene sitio de aparcamiento suficiente, ya que no es un hotel con muchas habitaciones, aunque tiene restaurante que atrae clientela de fuera del hotel.
El restaurante es muy acogedor. El desayuno incluído en el precio de la habitación es exquisito, muy abundante, con zumo de naranja natural, pan, bollería, embutidos... Y se puede repetir de todo lo que uno quiera.
Y además hacen una tortilla de patata exquisita, tanto de pincho con las consumiciones como de ración para cenar.
Pedimos dos habitaciones dobles y nos dieron las abuhardilladas de arriba. Han sabido conservar muy bien la estructura original de la casa, con un mobiliario muy bonito y son muy espaciosas.
Esta es una de las habitaciones con un balcón bastante grande donde poderse relajar después de un día de visita por la zona.
Y las vistas que tendremos a cualquier hora del día de la ría de Cedeira son extraordinarias.
Ésta era la otra habitación que nos dieron, también muy espaciosa.
Y la sorpresa del establecimiento es que tiene un pequeño Spá para disfrutar los clientes del Hotel. Tiene una piscina con chorros...
Y también una ducha de hidromasaje y una sauna.
Y encima con unas vistas de la ría de Cedeira desde el propio Spá.
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